El Hotchkiss Grégoire Cabriolet de 1952 es el más raro de los vehículos Hotchkiss-Grégoire que debutaron en el Salón del Automóvil de París de octubre de 1951. Las muchas características avanzadas del automóvil, desde su bajo coeficiente de resistencia aerodinámica hasta su suspensión y agarre en carretera avanzados, así como su economía de combustible de 27 mpg, cautivaron a la prensa y a los asistentes a la feria. Se trataba de una estructura extremadamente compleja con una alta proporción de piezas de Alpax que frecuentemente debían fundirse y refundirse. Los paneles de aluminio también aumentaron los costes, especialmente cuando Chapron los fabricaba a mano. El motor de 4 cilindros de aluminio, horizontalmente opuesto, refrigerado por agua, aunque estaba bien diseñado y era duradero, no compartía piezas comunes con otros motores Hotchkiss. Incluso a un precio de venta al público de unos 2 millones de francos franceses (más del doble que un Ford Vedette o un Citroën 15-Six), el coche se vendió con pérdidas. De los 247 coches fabricados en tres años, había 7 cupés y 5 descapotables con carrocerías hechas a mano por Henri Chapron. El nuestro fue anteriormente propiedad de la familia real de Tailandia.
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